Recientemente se estrenó en Prime Video, esta docuserie compuesta por 8 episodios de aproximadamente una hora cada uno que está basada en el libro “Historia de un desafío” escrito por Manuel Sánchez Corbí coronel de la Guardia Civil y la cabo 1º Manuela Simón. Ambos participan también en el documental que ha sido dirigido por Hugo Stuven, sobre un guion firmado por David Zurdo y contando con la dirección editorial del periodista José Antonio Zarzalejos.
Lo que desde mi punto de vista hace más interesante, a la vez que necesario, este tipo de documentales, es el resultado de un estudio basado en un muestreo realizado sobre 1.262 personas de entre 18 y 75 años, que la consultora GAD3 hizo público a principio de año, según el cual más de la mitad de los españoles cree que ETA sigue activa y el 20% todavía cree que el atentado del 11M fue perpetrado por la banda, mientras el 95% de españoles desconoce el número de víctimas de ETA y el 60% de los jóvenes de nuestro país no sabe quién fue Miguel Ángel Blanco.
Por otra parte, ahora que escuchamos en un Parlamento erizado y grotesco, las acusaciones al actual gobierno de hablar y pactar con los nacionalistas vascos por parte de una derecha descompuesta y ambiciosa de poder, no le vendrá mal a los jóvenes comprobar que el Partido Popular cuando Aznar se encontraba al mando del ejecutivo, mantuvo conversaciones y negociaciones con ETA.
Según indican desde la plataforma, con la intención de ser lo más neutral posible, optaron por no incluir un narrador que pudiera influir de manera sesgada, recogiendo solo las voces, opiniones, sentimientos o emociones de los que cuentan su experiencia, voces de periodistas como Iñaki Gabilondo o el propio Zarzalejos que participó además en la edición de la obra, o también políticos como José M.ª Aznar, Felipe Gonzalez, José Luis Rodríguez Zapatero; ex-lehendakaris como Garaikoetxea y Ardanza y afectados o familiares de afectados de uno y otro lado como Jesús Alvarez (yerno del empresario Emiliano Revilla secuestrado por la banda) e Irene Villa entre muchos otros.
Igualmente participan los autores del libro en el que se basa la obra, además del Teniente General de la Guardia Civil D. Pablo Martín Alonso que figura en la cabecera de este artículo y un jefe de la policía francesa que coordinaba las detenciones e intervenciones en Francia. Excepcionalmente periodistas como Gemma Nierga que lo fue de la cadena Ser y que lo hace como amiga personal de Ernest Lluch, ministro de Sanidad y Consumo del gobierno socialista, un hombre culto, íntegro y valiente, víctima también de un atentado perpetrado por ETA.
A pesar de lo dicho, en mi opinión, tal como está estructurada la obra queda sesgada, en parte porque está contada desde el punto de vista del cuerpo de la Guardia Civil, no en vano comienza con el primer atentado perpetrado sobre Pardines, el número de la unidad de tráfico y culmina con la detención por parte del cuerpo de los últimos militantes de la banda que fueron los que encapuchados comparecieron ante televisión para leer el comunicado de abandono de la lucha armada de manera indefinida que no la rendición.
Porque a consecuencia de lo que digo por ejemplo, no participan representantes de otras unidades de las fuerzas de seguridad del Estado como la Policía Nacional, ni víctimas de ese cuerpo aunque me consta que las hubo. Y mucho menos se da cuenta de los preámbulos de la banda, lo que dio lugar a su formación y que les empujó a convertir la lucha nacionalista en lucha terrorista o ahondar más en la responsabilidad de la iglesia en la creación del conflicto.
No obstante creo que esta docuserie es el complemento ideal para entender mejor la serie PATRIA, que está emitiendo HBO, una obra de ficción basada en el libro homónimo de Fernando Aramburu que en su día comenté en este mismo blog o de La Línea invisible otra miniserie que también comenté.



