EL ACIAGO ESFUERZO

Antonio Aramayona

Cuando estés leyendo estas líneas, ya habré muerto”, así posteaba en su Blog Antonio Aramayona a las 15:37 horas del 5 de julio. Pronto comenzaremos a escuchar y leer en los medios, si el asunto suscita interés cosa de la que tampoco estoy muy seguro, tonterías tales como otro pobre discapacitado que se suicida u otra víctima del movimiento por el derecho a morir, etc…

Cuando Ramón Sampedro, cuyo caso inspiró la película “Mar adentro” de Amenábar, puso fin a su vida se habló de todo menos de su lucha (a su manera) por el derecho a morir dignamente, algo que fue centro de sus empeños durante varios de sus últimos años de vida. Incluso la película, influida por un pensamiento judeocristiano se empeñó en intentar justificar con la invalidez la causa central del suicidio. Otros como yo o el Foro de Vida Independiente, decíamos que acaso si hubiera contado con ayudas técnicas que facilitaran su vida y medios económicos para afrontarla, seguramente hubiera dirigido sus esfuerzos a la lucha por los derechos de las personas con diversidad funcional como él y no tanto a la lucha por una muerte digna y eso que me declaro como ambos dos, defensor de tal derecho.

El paralelismo entre Sampedro y Aramayona se centra en dos cosas, ambos eran  diverso funcionales y ambos eran socios y colaboradores de la organización “Derecho a Morir Dignamente”. Sin embargo, mientras el primero tenía una vida miserable desde el punto de vista de medios y ayudas técnicas, que lo llevaron a interiorizar su vida y reducirla a cuatro paredes, el segundo era profesor de filosofía y tenía medios económicos suficientes para proveerse de ayudas técnicas y de otro tipo que facilitaran y de hecho fue así, su vida independiente.

No obstante pienso que ambos fueron víctimas de su depresión, en el caso del primero por las razones ya expuestas y en el caso de Aramoyona que dedicó su lucha a la igualdad, la educación de calidad, gratis y universal, el resultado de las últimas elecciones lo sumieron en una depresión que le hizo volver a su pensamiento de libertad de elección también respecto a elegir el momento de morir.

Artículo publicado en LA NUEVA ESPAÑA el 10 de julio de 2016

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