Dirigida por Todd Phillips, la recientemente estrenada Joker ya se ha convertido en la película más taquillera, lo que en parte pueda deberse seguramente a la excelente interpretación del actor puertorriqueño Joaquin Phoenix, probablemente merecedor de un Óscar.
Películas de este tipo en las que se suele hacer, aunque este no sea el caso, apología del crimen a través de la enfermedad mental no son de mí, predilección, es más escapo de ellas, pero el hecho de haber sido premiada con en León de Oro en el reciente certamen del Festival de Venecia y las críticas favorables que leí de ella, acrecentaron mi curiosidad y no me arrepiento de ello.
Visible en PRIME VIDEO, Se trata de una película inquietante, dura y acaso premonitorio de una sociedad a la que nos acercamos inexorablemente la de la individualidad, una sociedad antipática con el ser humano, en la que priva el éxito individual a costa de una colectividad machacada. El drama que desde la infancia rodea al protagonista es de tal envergadura que uno entiende sus problemas psíquicos y los interioriza como suyos. Donde me pierdo es como puede nacer a partir de ahí una revolución en una gran ciudad aunque sea imaginaria como es el caso.
Cuenta en Filmaffinity con 8,4 puntos y una SINOPSIS que dice lo siguiente:
Arthur Fleck vive en Gotham con su madre, y su única motivación en la vida es hacer reír a la gente. Actúa haciendo de payaso en pequeños trabajos, pero tiene problemas mentales que hacen que la gente le vea como un bicho raro. Su gran sueño es actuar como cómico delante del público, pero una serie de trágicos acontecimientos le hará ir incrementando su ira contra una sociedad que le ignora.
